Conversación virtual, destinada a público adulto, en torno a la obra Prisión (1927), de Tatiana Glebova.

La situación que estamos viviendo nos hace reflexionar sobre nuestro trabajo como educadoras de museos de otra forma, pensar en las posibilidades y experimentar con formatos para seguir teniendo contacto con el público. De ese deseo surge Un café, una conversación, un espacio virtual para conversar sobre algunas obras del Thyssen.

¿Sobre qué obra vamos a conversar? En nuestro tercer café-conversación queremos hablar de Prisión (1927), de Tatiana Glebova; un lienzo de gran formato, que fue realizado en 1927 por Glebova para la Casa de la Prensa en San Petersburgo, entonces Leningrado. 

¿Quién puede participar? La conversación está abierta a público adulto, a partir de 18 años. No hace falta ser un experto, basta con tener ganas de conversar y compartir pensamientos y reflexiones con otras personas. ¿Cómo hacerlo? Enviando un correo electrónico a educathyssen@museothyssen.org. El café-conversación tendrá un máximo de 8 participantes a los que se comunicará su plaza por correo electrónico. 

Y después, ¿dónde me dirijo? Una vez te hayas inscrito en la conversación, te facilitaremos una dirección para la reunión a través de la aplicación Google Meet.

  • Fechas
    13 de mayo de 2020
Dirigido a:
Público general

Comentarios

María Quintas
María Quintas

Hoy la obra Prisión de Tatiana Glebova ha sido más libre que nunca. Ha salido del almacén y se ha expuesto a la mirada del público tal y como su autora lo deseó en 1927 cuando la realizó para estar expuesta en las paredes de la Casa de la Prensa en el Actual San Petersburgo. Hemos hablado de la situación de la mujer en la Vanguardia Rusa y en la colección Thyssen; del cambio de atribución en la autoría de la obra, ya que durante años fue atribuida a Pavel Filonov, su maestro; de la sensación angustiosa, apocalíptica, inestable y abigarrada de la obra; y de su complejo lenguaje que nos ha recordado a otras vanguardias como el Cubismo, el Surrealismo o el Futurismo. Tatiana Glebova nos ha recordado que prisiones puede haber en muchos lugares y ser de muchos tipos. Un placer poder compartir, un placer poder conocer y un placer volver a vivir la rabiosa actualidad de las obras de arte.

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